domingo, 31 de marzo de 2013

AL CAPITÁN BENJAMÍN CHÁVEZ VALDIVIA (1890)

Caballero de porte gallardo, locuaz
asomas agudo al encuentro fugaz
sin saberlo fuiste autor de algún bastardo

Caminas por los pasillos púrpura
al encuentro de lentejuelas que acaban
esparcidas en el caliente asfalto

Al saberte hallado ¿acaso asentiste
a los ojos de niño ?
inocentes sonrisas que se desdibujaron
sin poder conocer el jardín de casa
el dulce algodón de la feria
el boleto de la tómbola dominical

¿Acaso tu calor no se extinguió?
apenas sirvió de cobija ajena
en el arbitrio de lo ficticio
lejos del tiempo y el espacio
el olvido se mantuvo calmo
sin perdonar el pasado
caballero de porte borrado
por la omnipotencia, aún
con bigote perfilado.

¿Acaso hallasteis cielos
con cantos de oro?
Piensa por un instante en los
oscuros días del infierno
que borraron tu secuela
tu invisible extirpe
tu anodina imagen
tu reluciente espada roma
que habíais registrado
en una de tus bodas

Nada de aquello perdura
solo la más limpia sonrisa
de aquel rebelde niño
que alguna vez le narró
a su prole su infancia
en Maipú 555